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El reo, de 20 años, comenzó a insultarles: “Hijos de puta, sacadme de aquí. Mi madre dice que me soltéis”.
Los hechos se produjeron a las 18.30 horas en el módulo 7 de Madrid II –que alberga a sujetos conflictivos–, cuando un recluso de 20 años, que lleva poco tiempo interno, comenzó a proferir gritos e insultar al personal, fuera de sí, presumiblemente a causa de un brote psiquiátrico. “Hijos de puta, sacadme de aquí. Me lo ha dicho mi madre. Me tenéis que soltar”. Y empezó a lanzar todos los objetos que tenía a su alcance, entre ellos el kit de aseo personal, hacia la puerta de la celda, indicó un portavoz de Agrupación de Cuerpos de Administración de Instituciones Penitenciarias(Acaip). Por ello, acudieron hasta el lugar cuatro funcionarios que fueron alcanzados por algunos objetos al entrar.
Fue en el forcejeo para tratar de reducirle cuando el sujeto comenzó a dar mordiscos a uno de ellos, al que además, le rompió las gafas. Los otros tres resultaron con heridas en una pierna, mano y brazos que no revisten gravedad.
Ante lo ocurrido, Acaip denuncia el temor de que las agresiones aumenten ya que a esta prisión van a ser trasladados los preventivos de 18 a 24 años y los penados menores de 21. “Si a la edad media de la plantilla, de 55 años, se suman los 70 puestos que están sin cubrir, la ecuación es fácil”.
El sindicato señala que, en breve, tendrá lugar un curso de boxeo en el centro para formar en dicha disciplina a los internos, curso a cargo de la Administración, mientras que, “paradójicamente, desde hace años, no viene invirtiendo cantidad alguna en este ámbito para formar a los trabajadores, los cuales tienen que poner dinero de su bolsillo si quieren acceder a cursos privados de formación en ese ámbito”.