- La procesión del silencio o Santo Entierro, quizás la más solemne de la Semana Santa alcalaína, puso el broche de oro a las procesiones del Viernes Santo.
- Crónica gráfica de Noel Viñas para ALCALÁ HOY
El recorrido este año comenzó a las 23:00 horas en la Catedral-Magistral, en una noche fresca pero seca, parecía mentira que un par de horas antes se hubiese tenido que suspender las procesiones de la Soledad Coronada y de Medinaceli por la lluvia.
En primer lugar, en presencia del Obispo, Juan Antonio Reig Plá, de los cientos de fieles asistentes a la procesión, y del alcalde, Javier Rodríguez Palacios, y de los concejales María Aranguren, Alberto Blázquez, Octavio Martín y Rafael Ripoll, se realizó el juramento de silencio a las puertas de la Magistral. Acto seguido la imagen del Santísimo Cristo Yacente salió con el Himno Nacional.
Tras el juramento, el único sonido que podía escucharse por las calles era el del tambor y la campana que marcaba el ritmo de la procesión por Calle Mayor, Carmen Calzado, Calle Gallo, Calle Trinidad, Plaza de San Juan de Dios, Cárcel Vieja, Emperador Fernando, Calle Santa María la Rica, Empecinado, Plaza de los Santos Niños, Santa Lucía y entrada de nuevo en la Catedral Magistral sobre las 2.15 de la madrugada.
La Cofradía del Sto. Entierro y Ntra. Sra. de los Dolores
La Cofradía del Sto. Entierro y Ntra. Sra. de los Dolores se funda, según el relato anónimo de los Anales Complutenses, en los albores del siglo XVI, permaneciendo activa hasta la Invasión Francesa. Por entonces tenía su sede en el Convento de Mínimos hasta la desamortización; después de un siglo inactiva, resurge con fuerza y lidera la Semana Santa Complutense hasta la proclamación de la II República.
En el año 1949 aparece de nuevo. A su procesión se la denomina del “Silencio” y en la Lonja de la Magistral se hace el juramente de silencio.