- Yolanda Besteiro cree que la combinación de Secretario General y Alcalde tiene demasiados riesgos políticos de cara a las próximas elecciones municipales y que la acción de gobierno ha debilitado la presencia del Partido Socialista en la ciudad.
“En estos dos años el Partido ha desaparecido detrás de la gestión municipal y eso hay que corregirlo porque el gobierno es la meta, pero el instrumento es el Partido y ahora está completamente desactivado y desmovilizado”.
Este próximo domingo 26 de Noviembre, los socialistas complutenses tienen una importante cita para renovar la secretaría general y la ejecutiva que dirigirá el partido hasta las Elecciones Municipales de 2019. La concejal socialista y presidenta de la Federación Estatal de Mujeres Progresistas Yolanda Besteiro, ha presentado su candidatura y será la rival del alcalde socialista y actual secretario general de la agrupación alcalaína en esta votación interna que elegirá la nueva dirección local hasta los comicios municipales de 2019.
ALCALÁ HOY ha entrevistado a la candidata, al igual que ayer lo hiciera con Javier Rodríguez Palacios, y esto es lo que nos ha dicho.
- ¿Por qué ha tomado ahora la decisión de presentarse?
“Porque creo que es el momento, el mejor para el partido y la ciudad. Muchos compañeros y compañeras compartimos el mismo análisis: desde 2015 con la llegada al gobierno de la ciudad la prioridad se desplazó del Partido a la Institución; el trabajo orgánico se ha ido postergando, la militancia se ha desactivado y al final nos olvidamos que los gobiernos pasan pero el Partido es lo que queda”.
“En estos dos años el Partido ha desaparecido detrás de la gestión municipal y eso hay que corregirlo porque el gobierno es la meta, pero el instrumento es el Partido y ahora está completamente desactivado y desmovilizado”.
“Ha habido otras veces que he estado cerca de tomar esta decisión, pero cuando había un proyecto claro y definido, y el de Javier lo era en 2011 y 2015, siempre preferí formar parte de él porque lo importante era sumar para ganar y porque, en definitiva, no he creído que la política fuera cosa de nombres propios. Ahora creo que la situación ahora exige dar un paso al frente porque estos años en el gobierno han desdibujado el proyecto político del Partido, y así me lo han hecho ver muchos compañeros y compañeras”.
- Más partido, mejor ciudad… ¿Cómo materializa su lema de candidatura?
“Deseo recuperar el partido, hacerlo más fuerte, que hay mayor debate y proyectos que marquen el camino a una acción política firme, recuperando la ilusión en la militancia porque sólo así recuperaremos la conexión perdida con la ciudad. Por tanto, mi objetivo, el objetivo de las personas que me acompañan, es la de recuperar para la Ejecutiva Local el poder de adoptar las decisiones políticas que le corresponden como legítimo órgano de dirección y recuperar también su capacidad de diálogo con la ciudadanía y con el conjunto de entidades y asociaciones alcalaínas”.
- ¿Su candidatura se podría ver como una especie de censura interna al trabajo del Alcalde?
“Todo lo contrario. El gobierno es la mayor responsabilidad que tenemos los socialistas y lo que tenemos que hacer es apoyar su trabajo. Un gobierno fuerte tiene que tener detrás un partido fuerte”.
- ¿No lo es ahora?
“Evidentemente, no. No se hace política desde el partido, sólo se hace desde el gobierno y por los que estamos en el gobierno. Este desplazamiento de las prioridades ha dejado unas estructuras de partido extremadamente débiles: no hay militancia, no hay ilusión”.
- ¿Pero no va a generar división el hecho de confrontar con el otro candidato, que es además el alcalde?
“La lectura política correcta que tenemos que hacer es que queda un año y medio de gobierno. En este tiempo todos los partidos, y más nuestros propios socios de gobierno, van a reforzar su discurso partidista, van a tratar de marcar diferencias de cara a las elecciones. Por eso lo más inteligente es separar la primera responsabilidad de gobierno, la alcaldía, de la primera responsabilidad política, la secretaría general. Eso le quita presión al alcalde y le permite concentrarse en la ciudad mientras que desde el partido reforzamos el discurso orgánico”.
“Es decir, nosotros creemos que en el escenario político que tenemos delante, unir la secretaría general con la alcaldía hace más débil al partido, le deja menos margen de actuación y concentra demasiados riesgos. El propio José Manuel Franco, nuestro secretario general del PSOE-M ha hecho esta misma reflexión: no será candidato precisamente para armar un discurso político de partido fuerte. Por eso creo que mi candidatura, en una lógica política rigurosa, va a recuperar el trabajo de partido, a la militancia y a reforzar la gestión del grupo municipal”.
- ¿Entonces si es elegida secretaria general , renunciará a ser candidata?
“Hoy en día, con los Estatutos y Normas en la mano, en Alcalá no habrá primarias para candidato a Alcalde, por tanto no tiene sentido responder. Es una cuestión de acatar y respetar nuestras normas de funcionamiento”.
- ¿Y si cambian las normas, sería candidata?
“No es sensato especular en política con los “y si”. Entiendo que dan buenos titulares pero yo tengo que ser responsable con el tiempo en el que estamos y sería responder con una especulación a otra especulación. No tiene sentido y no nos lleva a ningún sitio. La realidad es que Javier es el alcalde socialista de Alcalá y tenemos que trabajar para que lo siga siendo”.
- ¿No se vería a ver afectada su gestión como concejala siendo además Secretaria General?
“Menos que la gestión de un alcalde, ¿no? Está claro que un alcalde tiene el máximo nivel de responsabilidad de la gestión municipal y por tanto, cualquier distracción de tiempo, recursos o energías siempre tendrá mayor influencia. Por eso mi candidatura nos da la oportunidad de reactivar el trabajo del partido, de volver a conectar con los ciudadanos y permite al alcalde la dedicación máxima a su primera responsabilidad.”
- ¿Hasta que punto cree que el PSOE alcalaíno se ha visto afectado por los procesos de primarias federales y regionales?
“Precisamente ese es el problema, que nos hemos convertido en los ejércitos de batallas que se han librado en Alcalá en nombre de otros. Y eso no es necesariamente malo. Forma parte de la vida de un partido. El problema es cuando en una agrupación sólo se convoca a los militantes para eso. Porque si antes y después de los procesos internos hay un trabajo político local, de militantes, de debate, de participación, eso nos acerca, construye puentes, abre diálogos…”
“El problema de la actual dirección política es que no ha construido ese marco local de trabajo y eso si es un problema grave porque la militancia política se reduce a separar a unos de otros, hacer bandos, conseguir avales y votar. Y nada más. Por ejemplo, en los últimos 15 meses sólo ha habido una Asamblea de debate político local: un año y tres meses en que los militantes sólo se han visto para confrontar, enfrentarse entre ellos y no para hablar de la ciudad y de sus problemas o para diseñar la actividad política del Partido”.
- Si llegara a ser Secretaria General del PSOE de Alcalá de Henares, ¿que propone, qué cambios le depara al partido en la ciudad?
“Mi idea fundamental es generar más y mejores espacios de participación de la militancia, realizar asambleas abiertas cuando nos lo demanden los colectivos sociales y complementar la acción del gobierno en un año decisivo…”
“En lo concreto me comprometo a que haya un límite máximo del 20% de los componentes del Comité Ejecutivo con duplicidad de cargos, a que las listas de las candidaturas municipales sean abiertas, a impulsar el principio de “un cargo, un sueldo” y de incrementar las incompatibilidades, no tanto desde un punto de vista legal y ético, que también, sino político y funcional. Creo además que desde el partido tenemos que crear una “agenda de la ciudad” como si fuera una especie de “temario” de asuntos esenciales sobre los que hay que forjar un consenso con los ciudadanos y ciudadanas”.