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Durante la comprobación en la mañana de este mismo lunes ha estado acompañado por la concejala María Aranguren y miembros de su equipo en el ayuntamiento.
- Crónica gráfica de Pedro Enrique Andarelli
Tal y y como avanzaba ALCALÁ HOY este domingo, el Ministerio de Defensa ha decidido desplegar a la UME (Unidad Militar de Emergencia), en las calles de las ciudades donde tiene desplegados contingentes, y que son Madrid, Valencia, Sevilla, Zaragoza, León, Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife.
Además del gran despliegue de Madrid y las unidades que patrullan en la vecina localidad de Torrejón de Ardoz, la Unidad Militar de Emergencias (UME) ya tiene operativos dos vehículos en el centro de Alcalá de Henares.
Se trata de soldados del primer batallón de la Unidad Militar de Emergencias que a primera hora de la tarde de este domingo salían de la Base Aérea de Torrejón donde se encuentran acuartelados. Las labores de estos militares es mantener la seguridad en las calles y evitar que los ciudadanos salgan, salvo caso de necesidad, para evitar la propagación del coronavirus. Luego se añadiría también un vehículo de la Guardia Civil.
Hoy mismo también hemos sabido que la Brigada Paracaidista al rescate del Hospital de Alcalá, al borde del colapso con aproximadamente 200 casos de coronavirus registrados en un centro público que cuenta con unas 300 camas para pacientes. Así, el Ejército de Tierra transportará este lunes 45 camas cedidas por dos hoteles de la localidad para habilitar el gimnasio y la biblioteca como zonas asistenciales.
Desde los altavoces de sus vehículos, los efectivos de la UME avisaban este domingo a los ciudadanos que no pueden salir “salvo motivos justificados. Si salen háganlo solos y guardando una distancia de dos metros con otras personas”, como se puede oír en el vídeo de Gloria Domínguez, una vecina de la zona compartido en una red social.
Video que por cierto, ayer mismo un blog digital de la ciudad, adicto a las fast news, firmaba como propio en un afán de exclusividad. El mismo blog que días atrás se hacía eco de la campaña de #QuedateEnCasa, al tiempo que invitaba a salir de tapas por Alcalá. Una vez más recordamos que no todo vale para ganar audiencias, y menos aún en una situación de emergencia sanitaria.
Nunca he tenido problema en comprar en tiendas de chinos, marroquíes o quienes sean.
Cuando empezó el virus en China, la clientela bajó mucho en las tiendas de alimentación de chinos como si llevaran el contagio en la nacionalidad. Yo seguí yendo.
Los chinos se victimizan ahora por aquello como excusa, pero lo que hacen es cerrar AHORA las tiendas de alimentación (las otras no me importan en este caso) y negarnos ese imprescindible servicio en este crítico momento. Lo encuentro altamente insolidario.
Hasta el “estado de alarma” permite la apertura de tiendas de alimentación y farmacias dada su imprescindibilidad.
En mi barrio hay una frutería de chinos frente a otra de marroquíes. El chino ha cerrado, pero el marroquí no. Los dos tendrán motivaciones económicas para mantener abierto y suficiente miedo como para querer cerrar, pero el chino ha cerrado y el otro no.
Mi aplauso para el otro. Da vida ver su tienda abierta e iluminada.
Hay ancianos y limitados que no se pueden desplazar muy lejos para comprar comida (el frutero chino tenía de todo: pan, huevos, leche…), el otro sólo tiene fruta.
Parece que ni el “estado de alarma” les obliga a mantener abierto, pese a la naturaleza de sus negocios.
Menos mal que tampoco hay una ley que me obligue a comprar en sus tiendas cuando todo esto pase. HE DECIDIDO NO VOLVER A COMPRAR JAMÁS EN UNA TIENDA DE ALIMENTACIÓN QUE HAYA CERRADO EN ESTAS CIRCUNSTANCIAS, sea de quien sea.
Me da igual si la decisión es de cada tendero o si es de una organización que llaman “la comunidad china” que -dicen- los organiza. Mi boicot llegará conjuntamente a quien lo haya decidido u obedecido.
Espero (y agradezco) que no haya muchos sanitarios como estos tenderos insolidarios.
Y que gente así nunca ponga farmacias.
Y dirijo mi aplauso, además de a los sanitarios, a los dueños y empleados de establecimientos de alimentación (tiendas pequeñas, grandes superficies), farmacias, camioneros que mueven la mercancía, policías, militares y todos los similares que están colaborando en defendernos de esto.
P.D.: Ya sé que ha habido chinos que han regalado mascarillas a hospitales y comisarías. Se lo agradezco mucho y sigo sin generalizar por nacionalidad.
Sólo acuso la insolidaria actitud de los tenderos que cierran en las presentes circunstancias. Que cada uno se fije en su barrio y actúe luego en consecuencia.