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La falta de información oficial y de plazos definidos alimenta la frustración vecinal en torno a la obra inacabada.

Lo que comenzó como una actuación puntual de ordenación del tráfico se ha convertido, para muchos vecinos del Distrito 2, en el símbolo perfecto del despropósito urbanístico: la rotonda de la Avenida de Madrid, conocida popularmente como la ‘rotonda del Atlético de Madrid’, cumple casi seis meses de provisionalidad, caos circulatorio y un visible deterioro del pavimento.

El apodo, que ya circula con naturalidad entre los residentes y en redes sociales, no es gratuito. El perímetro de esta rotonda no está delimitado por bordillos ni ajardinamiento, sino por cubos de plástico blancos y rojos, lo que recuerda inevitablemente a los colores del club rojiblanco. A falta de una estructura definitiva, los bloques simulan -con discutible éxito- una glorieta, lo que ha generado desconcierto entre los conductores y cierto hartazgo entre los vecinos.
La intervención, además, ha supuesto el corte parcial de la entrada a la Avenida de Madrid, una de las principales arterias de acceso y conexión del distrito con el resto de la ciudad. La reducción de carriles y la ambigüedad en la señalización provisional han provocado atascos, cambios de ruta improvisados y una circulación que, en hora punta, roza el colapso.
En el centro de esta rotonda improvisada se encuentra una fuente ornamental que, en teoría, debía aportar un toque estético al entorno. En la práctica, rara vez funciona. La mayoría del tiempo permanece seca, abandonada, rodeada de polvo y maleza, como un vestigio de lo que pudo ser y no fue.
Pero el problema no es solo estético ni logístico. El estado del firme en los accesos a la rotonda es preocupante. El pavimento presenta un evidente deterioro: grietas, parches mal resueltos y baches que castigan a diario las suspensiones de los vehículos. La sensación para quien transita por la zona es la de circular por una obra inacabada y olvidada.
A pesar de las quejas reiteradas de los vecinos y del evidente impacto en la movilidad del distrito, la actuación sigue sin completarse. No hay plazos oficiales claros ni información visible sobre cuándo se dará por finalizada la rotonda, ni si se contemplan mejoras reales en su diseño o en la funcionalidad de la fuente central.
Mientras tanto, la ‘rotonda del Atleti’ continúa como un ejemplo más de cómo una obra menor puede convertirse en un problema mayor cuando la planificación y la ejecución no van de la mano. Para muchos alcalaínos, esta rotonda ya no es solo un punto de paso: es un síntoma.















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No sabia que se llamaba del Atlético de Madrid. Siempre oí llamarla del Gal como la del túnel de la Fiat. Debe ser una rotonda de quita y pon a las veleidades de los técnicos de turno que toque por las veces que la han montado y desmontado. Lo habitual es plantar el cartelón con el proyecto, el presupuesto y quien paga la obra, cosa que no he visto. Supongo que es un quiero y no puedo, o intereses, chanchullos, cosas legales o vaya unted a saber. Es como una rotonda en nuestra señora de Belén o el polideportivo del juncal, incomprensible:ni están ni se le esperan.
Que os esperáis de la incompetente de la Piquet. Lo de gastarse un milloncito en la rotonda de la cruz roja si no tardo. Está Alcalá que da asco, asfalto reventado y no hace más que chapuzas. PSOE PP la misma mier… Es