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“Agradecemos a todos nuestros amigos el granito aportado para que Kingston diera luz a las noches de Alcalá durante estos 40 años. Un abrazo y salud, amigos. (14/3/2020)”, así nos comunicaba la dirección de Kingston Pub su cierre definitivo.
“Tras 40 años (8/7/1980) saboreando el mejor café irlandés y cócteles, además de haber disfrutado de grandes actuaciones con vosotros, nos despedimos con un hasta siempre amigos. Kingston Pub vacía sus copas y apaga altavoces, llegó el momento, Rafa se jubila”, anunciaba en sus redes sociales.
Situado dentro de un antiguo colegio mayor del Cardenal Cisneros, en la calle Santiago 8 de Alcalá de Henares y famoso desde 1980 por sus numerosas actuaciones en directo es además un pub de estilo Irlandés donde su café también irlandés era la estrella de la carta por ser muy apreciado a nivel nacional. Contaba con tres salas: una de tertulia, otra de actuaciones y la sala cueva – discobar donde estaba el DJ, y también actuaciones musicales, magia y monólogos.
En su carta se podían degustar todo tipo de cócteles como los mojitos, caipiriñas, tom collins y daikiris, entre otros ejemplos de la mejor coctelería. También eran sonados sus cotillones de nochevieja.
Kingston Pub ha sido un indispensable en las noches para varias generaciones de alcalaínos donde se podía optar por una noche tranquila de tertulia, o bajar a cueva a mover el esqueleto y en verano contaba con una terraza de verano acogedora y agradable.
Abrían de miércoles a domingo de 20:00 a 3:30 horas, y muchos han sido los grupos y cantautores que han desfilado por el local, y no solo artistas locales también grupos foráneos. Carlos Echegaray, Académica Palanca, Pedro Iturralde, Juan Cerro Jazz Quartet, Big Band del Foro, Lou Benet Jazz Trío, Chema Saiz Quinteto, Canal Street Jazz Band y un larguísimo etcétera.
Con el cierre de Kingston Pub se clausuran 40 años de recuerdos , de noches de nostalgia con aire decadente, que hacían aún más si cabe un ambiente romántico muy ‘demodé´, que hacía que el tiempo se parase para evocar los aromas de café irlandés, tabaco y música de calidad.