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Las principales empresas de la economía colaborativa han conseguido cifras espectaculares en inversiones y en valor de mercado, y todo ello en menos de diez años.
En efecto, las plataformas digitales juegan un papel primordial en las economías colaborativas. De hecho se ha afirmado que la economía colaborativa es un tipo de economía de plataforma con características colaborativas. El papel de la tecnología en esta nueva forma de relacionarnos es fundamental, tanto a nivel social como económico.
La economía colaborativa se lanza al mar
Aunque en sus orígenes la economía colaborativa se relacionaba con otros sectores, de un tiempo a esta parte ha dado el salto al mar, y empresas como Nautal hacen de intermediarias. En este ámbito se ha apostado por las técnicas de la economía colaborativa para que los propietarios intercambien sus yates o veleros con otros usuarios.
Pero, ¿en qué consiste exactamente la economía colaborativa? Se trata de dar, alquilar, tomar prestado, comerciar o compartir productos y servicios entre personas. Suele articularse a través de la intermediación de una empresa que posibilita que se compartan activos que están siendo infrautilizados.
Es conocida también como economía P2P (peer to peer), porque las partes de la transacción son personas particulares. Sin embargo la clave está en la intervención de un negocio encargado de supervisar el intercambio de productos o servicios. Estas empresas aplican las últimas tecnologías digitales y las aplicaciones móviles para interconectar a los usuarios con fluidez.
A pesar de que hay ya empresas que han conseguido un éxito espectacular en la economía colaborativa, se trata de un modelo de negocio que aún se está definiendo, sobre todo en lo relativo al cumplimento de la normativa vigente y su encaje con actividades profesionales similares.
Descubre las ventajas de la economía colaborativa
Uno de los principales beneficios de la economía colaborativa es la creación de oportunidades de autoempleo. Todos aquellos particulares que tengan activo o puedan ofrecer un servicio tienen a su disposición muchas plataformas para acceder a miles de posibles consumidores o clientes.
Otra ventaja evidente de la economía colaborativa es que se reduce el coste de la actividad. Son muchos los modelos de economía colaborativa que se basan en la utilización intensiva de Internet y el teletrabajo, lo que implica una disminución importante de costes que guardan relación con el transporte, el alquiler de locales, etc. Pero incluso en los casos en los que se quiera contar con una oficina, los espacios de coworking constituyen una alternativa más que interesante.
Cabe destacar también el aumento de las oportunidades de negocio, en la medida en que a través de la colaboración de diversos participantes se pueden sacar adelante modelos de negocio que serían inviables o muy arriesgados por parte de un único inversor. Pero la economía colaborativa dispara las oportunidades de hacer negocio, poniendo al alcance de la mayoría de la gente la posibilidad de emprender con pocos recursos.
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