- El grupo estadounidense envía a la comunidad, que rechazó su anterior proyecto, abundante documentación para clarificar dudas y superar la negativa inicial
- Esa oferta cultural y deportiva incluye ahora una laguna artificial de 6 hectáreas con playa, donde, si se aprueba el proyecto, se podrán realizar actividades guiadas como surf, kayak o voley playa.
Según relata ELPAIS.es, en una información rubricada por Javier Salvatierra, las pegas de la Comunidad de Madrid para rechazar el proyecto se resumían en tres aspectos. En primer lugar, Madrid sostenía que no estaba acreditada la viabilidad económica. Además, estimaba en 340 millones la inversión en infraestructuras necesaria para asegurar el acceso al complejo. Finalmente, subrayaban que el proyecto, en su primera fase, adolecía de una oferta cultural y deportiva suficiente para tramitarlo como un Centro Integral de Desarrollo (CID), un procedimiento excepcional que otorga ventajas fiscales, urbanísticas y administrativas, que era la vía elegida por Cordish para su inversión.
Joe Weinberg, consejero delegado del grupo estadounidense, asegura que llevan trabajando “meses” en la documentación que presentaron anoche a la Comunidad de Madrid, a la que ha tenido acceso EL PAÍS, para “aclarar cualquier duda” que aún pueda albergar el Gobierno regional.
- El Gobierno madrileño ha recibido la documentación y la va a analizar “rigurosamente“, para lo cual dispone, según marca la ley, de un plazo de un mes, salvo que requiera documentación adicional.
Los promotores aseguran, en el voluminoso paquete de documentación enviado anoche a la Comunidad, su “firme compromiso” de invertir en su totalidad los 2.200 millones de euros en que tasan el proyecto. Weinberg ha explicado que no necesitan “ningún tipo de subvención“ y aseguran que disponen de fondos propios para acometer sin demora la primera fase, que tasan en algo más de 587 millones de euros. Para el resto del complejo, incluyen en la documentación cartas de compromiso de financiación de los bancos M&T Bank y de Credit Suisse.
En el nuevo proyecto enviado al Gobierno madrileño, se amplía la superficie de la llamada Área Centro, que pasa a tener 92 hectáreas (el 70% de las 134 hectáreas de terreno que ocupa todo el complejo) para incluir la zona de la laguna donde se ubicaría la playa. La construcción de las áreas este y oeste (1.600 millones más, aunque en superficie sean mucho más pequeñas) se haría después, aunque Weinberg asegura que el compromiso es construir todo. Incluso más, ampliar el proyecto hasta 3.000 millones si tiene el éxito suficiente. Prevén que atraería a Madrid 1,6 millones de turistas adicionales al año.
Me pregunto si el actual vertedero de Alcalá, o el que se supone que van a construir en breve en Loeches, darán abasto para recibir todos los deshechos provenientes del futuro megacomplejo y alrededores.
¿Lo habrán tenido en cuenta?