- Pilar Blasco es licenciada en Lengua española y ha colaborado en publicaciones locales en temas de actualidad política y cultural.
El mundo woke se caracteriza, entre otras maldades, por inventar palabras, sintagmas y lemas con los que pretender cambiar la realidad, según una doctrina filosófica de los inventores del NOM y la Agenda de la galleta multicolor. Pedro Sánchez en su último discurso o declaración, modulando la voz lastimera y adoptando el gesto de pena y conmiseración que ya no convence ni a sus fieles, soltó esa frase, sustantivo adjetivo, seguida de una pausa efecto, delante de un atril en “no” respuesta a preguntas de algún periodista, como suele hacer -¿dónde vas?, manzanas traigo-. La palabreja de neolengua, probablemente inspirada por algún asesor áulico de los seiscientos y pico que hay en Moncloa, está haciendo fortuna en las teles del régimen, como tantas chorradas sin sentido inventadas para papanatas abducidos frente a televisión espantosa y sus terminales.
La frase, según la tribu monclovita, califica a los pobres ancianitos y ancianitas, que van a ver mermada su pensión por culpa del PP y la derechona extrema, Vox. En el paquete opositor fachosfera apenas se nombra al Junts de Puigdemont, por si acaso; por si acaso puede seguir engañando al de Waterloo estirando la cuerda con la que se mantienen mutuamente en equilibrio. La maniobra legislativa con la que se justifica, siempre según la tribu, la negativa de la Oposición, consiste en una suerte de encerrona, muy vista ya, la que en otras ocasiones ha pillado por sorpresa o por complejo a la oposición, consistente en meter en el paquete de un decreto ley un refrito de leyes variopintas a las que votar sí o no en bloque. En este caso, como ya sabemos, entraba entre otras cosas un regalazo en París al PNV, una ley pro ocupación, una bajada del abono transporte, ayudas a los afectados de la Dana (que ya hace falta ser malvado para camuflar y poner en riesgo algo tan importante), una subida ridícula, de las pensiones acompañada de otra subida más -van más de 80- de impuestos, entre ellos el IVA. Y alguna cosa más entre churras y merinas.
Para empezar, la ofensiva conmiseración con los pensionistas demuestra que la tribu socialista se aferra, por soberbia o por ignorancia – o como parte del juego- a su concepto del pensionista como los pobres ancianitos incultos, creyentes de sus mentiras, a los que seguir comprando con limosnas mensuales a la vez que los esquilman a impuestos y les suben los precios de primera necesidad. Los que tienen a sus hijos y nietos en el paro o exiliados por el mundo, después de graduarse en difíciles costosas carreras pagadas por las familias. Ignora o pretende ignorar la tribu, que no somos los jubilados de los 90 ni siquiera del 2000. La mayoría de los jubilados de 2025 somos gente formada e informada, gracias, entre otras cosas, a las denostadas y censuradas redes sociales, plataformas alternativas que manejamos con naturalidad y que ellos no alcanzan a dominar a pesar de sus censores espías a sueldo.
Tiene guasa si no fuera obsceno y denigrante que el mismo anciano que confía en el alquiler del piso que compró ahorrando y trabajando duro, como alivio a su exigua pensión, para vivir dignamente después de la jubilación, se encuentre con las leyes de alquiler que limitan los precios y favorecen al okupa. Los casos que vemos son flagrantes y sangrantes pero parece que esas ancianas viudas y deprimidas que tienen su piso ocupado y destrozado, no conmueven el corazoncito de Sánchez, no entran en el “dolor social” que paradógicamente causa la derechona, no las leyes socialistas. No entra en el dolor social del PSOE las consecuencias de la inmigración masiva y descontrolada, alojada en hoteles de lujo con el dinero de los españoles, los pensionistas también, mientras sus hijos viven en la casa familiar al amparo de la pensión de los padres, o comparten piso con otros cuatro mileuristas; sin proyecto de futuro, ni de familia.
Una vez más, Sánchez y su gobierno ha tenido la desfachatez de salir al atril a tomarnos por idiotas. Y puede que tenga razón, teniendo en cuenta que muchos pensionistas y no sólo pensionistas, sólo miran los 15 ó 20 euros de subida en la nómina mensual y cierran los ojos a los tikes de la gasolinera, el super, los libros de sus nietos y demás productos de supervivencia; la falta de vivienda y la inseguridad en sus barrios pagada con su dinero. Que no son conscientes del engaño o si lo son, prefieren seguir alimentando al monstruo que los devora poco a poco junto a justos y pecadores, por tal de que la fachosfera no llegue al poder. El grado de abducción a que ha llegado una gran parte de la población española es digna de estudio sociológico. Si no fuera porque a lo largo de la historia reciente ha habido y hay casos semejantes sin explicar racionalmente.
Para completar el trabajo y mostrar el “dolor social”, los sindicatos del régimen, como no, se tiran a la pancarta y la tamborrada callejera. Los del sueldazo inmerecido y la subvención con nuestro dinero, actuando contra los ancianitos desvalidos a los que probablemente arrastrarán estos días a rellenar las manis, tan contentos, tan adulados y engañados voluntariamente por tradición izquierdosa de toda la vida. Alejados de la realidad por acción de las ideologías y la propaganda que en los últimos años ha conseguido convertir lo blanco en negro y la mentira en verdad. Esa posesión manipuladora de las mentes es el verdadero dolor social.
Usted si que nos toma por idiotas. Está claro que usted pertenece a la España que no madruga y me provoca dolor en las pestañas cuando intento leerla.
Pues tómese un paracetamol si tanto le duelen las pestañas. Aunque eso no alivia su indigencia intelectual. O eso o no lo lea.
Ya ha intentado descalificar a la articulista. Ahora le falta argumentar contra el artículo.
¿Se comería Vd. un plato con salmón, solomillo, tarta de nata y mierda de perro, pero todo todo (un plato ómnibus)? Pues eso, que le aproveche.
¿Obsceno, denigrante…? Sí, Pilar, todo eso y más…y mucho más que ha hecho, hace y hará el PP, VOX y eso llamado Junt. Todo lo que sea con tal de que la derecha vuelva a gobernar. Curioso, una derecha que habla de mirar a los ciudadanos, de tener en cuenta a los modestia pensionistas, a los que necesitamos los servicios Públicos… Vamos, una derecha que ignora esas necesidades porque !son costosas! Una derecha que privatiza, que “inaugura” el proyecto que es posible no llegue a funcionar…como mantener los servicios Públicos en buen funcionamiento, como el agua del vado y duchas e las piscinas cubiertas para mayores y niños que llevan 3 semanas con el agua a temperatura no permitida, pero que la sra Piquet y sus concejales no consideran que sea necesario arreglar y que estén en perfecto funcionamiento. No, Pilar Blasco, Piquet y ese cuartel de charlatanes que acusan al Gobierno de mentir y ellos permiten DIFAMAR.
Gracias por tan claro y certero articulo Pilar. Efectivamente hay una parte de españoles infantilizados. Cualquier persona sin estudios sabe de cuentas y no se deja tomar el pelo por los cínicos argumentos del Presidente Sánchez, que está vendiendo España a trozos a los separatistas, y con nuestros impuestos y déficit. Hace tiempo que se sabe que Sánchez no da puntada sin hilo, y las regulaciones “onmibus” son una de las trampa. Ahora dice que volverá a presentarla, contando con comprar de nuevo los votos que le faltan de Junts.
Recuerdo cuando, durante el Covid, coló entre medidas sanitarias, y vía disposición adicional, a Pablo Iglesias en el CNI (ello nos costó que Israel o Estados Unidos dejasen de compartirnos información de terroristas). Sus votantes, o están comprados, o se dejan engañar.