Brutal agresión a dos policías fuera de servicio en la calle Mayor

• La UFP confirma que uno de los agentes perdió tres dientes y visión en un ojo; el otro sufre fractura de clavícula.

Dos agentes de la Policía Nacional destinados en Alcalá de Henares fueron salvajemente agredidos en la madrugada del domingo cuando regresaban a sus casas tras una cena de compañeros del Grupo Operativo de Respuesta (GOR). Los hechos ocurrieron en plena calle Mayor, en el corazón del casco histórico complutense, cuando un grupo de individuos se abalanzó sobre ellos por la espalda, al grito de “ahora no estáis de servicio, putas ratas”.

Según la información confirmada por fuentes policiales, la agresión se saldó con dos agentes hospitalizados de gravedad y al menos un detenido. Los agresores, una turba de unas seis personas, habrían sido reconocidos por los agentes como vecinos del entorno del polígono Puerta de Madrid, una de las zonas más conflictivas de la ciudad.

Reconocidos y atacados por la espalda

Los policías formaban parte de un grupo que había cenado en un restaurante del centro junto a otros compañeros del GOR, la unidad especializada en seguridad ciudadana y respuesta rápida ante delitos de especial incidencia. Al terminar, los dos agentes iniciaron el camino de regreso, sin imaginar que serían reconocidos por varios individuos que los esperaban o los interceptaron en el recorrido.

Sin mediar palabra, según el relato del sindicato Unión Federal de Policía (UFP), “fueron atacados por la espalda, con cobardía, sin capacidad de defensa, y sin mediar palabra recibieron el primer puñetazo”. Los agresores, prosigue el comunicado, les espetaron la frase que ya ha encendido la indignación entre los cuerpos policiales: “ahora no estáis de servicio, putas ratas”.

Otros dos agentes que caminaban unos metros por delante escucharon el alboroto y regresaron corriendo para socorrer a sus compañeros, a los que encontraron tendidos en el suelo y con heridas de gravedad. Ellos mismos les trasladaron de urgencia al hospital Príncipe de Asturias, donde ambos permanecen ingresados.

Heridas graves y conmoción en la comisaría

Las consecuencias del ataque han sido muy graves. Uno de los policías ha perdido tres piezas dentales, no tiene visión en un ojo y los médicos sospechan de una fractura de mandíbula. Su compañero tiene rota la clavícula. “Podía haber acabado en tragedia”, lamentan desde la UFP, que acompaña a las víctimas y sus familias.

En la comisaría de Alcalá de Henares la noticia ha caído como un mazazo. Los agentes del GOR son conocidos por su trabajo diario en la calle, en los operativos de control de drogas, seguridad ciudadana o apoyo a intervenciones en barrios de riesgo. “Salen cada noche a mantener el orden, y esto es lo que reciben”, comenta un agente consultado por este medio. “El respeto al principio de autoridad se ha perdido, y cada día es más peligroso vestir el uniforme, incluso cuando no lo llevas puesto”.

El ataque llega apenas unas horas después de que otro policía nacional resultara herido de gravedad en Sevilla tras recibir un disparo con un arma larga durante un operativo antidroga. Para los sindicatos, ambos hechos ilustran una escalada preocupante de violencia hacia los cuerpos de seguridad.

Investigación en marcha y exigencia de medidas

El caso ya está siendo investigado por el Grupo I de Delitos contra las Personas de la comisaría de Alcalá. Según fuentes de la investigación, se ha practicado una detención y se sigue el rastro de los demás implicados, que podrían ser hasta seis. Los primeros indicios apuntan a que algunos de ellos son delincuentes habituales, conocidos por los propios agentes agredidos por intervenciones previas en la zona.

La Unión Federal de Policía ha emitido un duro comunicado denunciando lo ocurrido y exigiendo “medidas judiciales y policiales urgentes”. “Por el mero hecho de ser policías, de servir al ciudadano y de representar la legalidad, recibieron una brutal paliza”, señalan. El sindicato reclama de nuevo que la profesión sea declarada de riesgo: “Estamos siendo atacados. Si el Gobierno no nos defiende, lo haremos nosotros”.

Desde el colectivo recuerdan que los dos agentes son afiliados a la UFP y que recibirán apoyo jurídico y administrativo completo. “Vamos a personarnos en el procedimiento. No puede quedar impune”, afirman.

La conmoción también ha llegado al ámbito municipal. Aunque el Ayuntamiento no ha emitido todavía un comunicado oficial, el suceso ha corrido como la pólvora en redes sociales y grupos vecinales, especialmente al tratarse de un episodio violento ocurrido en pleno centro histórico.

En la calle Mayor, aun a media mañana del domingo, algunos comerciantes comentaban la agresión entre la incredulidad y la preocupación. “Aquí siempre hay vida nocturna, pero esto es otra cosa, una barbaridad”, decía el encargado de un local cercano. Otros recordaban el papel de los agentes del GOR en la contención de pequeños focos de conflicto en la ciudad: “Están siempre donde hay lío, y al final acaban siendo objetivo de los mismos que deberían temerles”.

Mientras tanto, ambos agentes continúan hospitalizados, recuperándose de las graves lesiones sufridas. La investigación sigue abierta, y la Policía no descarta nuevas detenciones en las próximas horas. Desde el sindicato recuerdan que “podía haber terminado en tragedia” y que, más allá de la agresión concreta, lo sucedido refleja “un preocupante deterioro del respeto hacia quienes representan la ley”.

¡ Nuestro canal en Telegram! Si te ha interesado esta información, únete ahora a nuestro canal de telegram @alcalahoy para estar al tanto de nuestras noticias.