- La violación de una joven de 18 años en el barrio de Venecia reabre el debate sobre la seguridad ciudadana y provoca duras reacciones institucionales y políticas.
La madrugada de este lunes, Alcalá de Henares volvió a estremecerse con una nueva agresión sexual. Entre las 03:30 y las 04:10 horas, una joven de 18 años, de nacionalidad chilena y residente en la ciudad, fue abordada por un hombre de 46 años en las inmediaciones de la Glorieta de los Abogados de Oficio. Según fuentes policiales, la víctima acababa de salir de un bar cuando el individuo, en evidente estado de embriaguez, la arrastró hasta la ribera del río Henares, en la zona del barrio de Venecia, donde la sometió y la violó en dos ocasiones.
Pese al estado de shock, la joven consiguió llamar a sus amigas y contarles lo sucedido. Ellas alertaron inmediatamente a la Policía Nacional, que desplegó un operativo urgente en la zona. Tras tomar declaración a la víctima y con su descripción precisa, los agentes localizaron al sospechoso minutos después en la glorieta y procedieron a su detención. El hombre, de origen peruano y residente en la ciudad, no solo no opuso resistencia, sino que admitió de inmediato los hechos antes de ser trasladado a dependencias policiales.
La víctima fue atendida en primera instancia por los servicios de emergencias y trasladada en ambulancia al Hospital Universitario Príncipe de Asturias, donde recibió asistencia médica y psicológica. Horas más tarde, ratificó la denuncia en la Comisaría de Alcalá de Henares.
Aunque en un primer momento varios medios nacionales difundieron que la víctima era española, ALCALÁ HOY ha podido confirmar con fuentes municipales que su verdadera nacionalidad es chilena.
Otro caso reciente y un repunte preocupante
El pasado 28 de junio, otra joven de 21 años fue violada por un hombre de la misma edad, originario de Mali, que estaba acogido en el Centro de Emergencia, Acogida y Derivación (CAED) de Alcalá de Henares. El ataque se produjo en un camino de tierra que rodea el acuartelamiento Primo de Rivera, donde se ubica dicho centro. El autor de aquella agresión sexual fue detenido días después y el juez ordenó su ingreso en prisión provisional.
Según los últimos datos de criminalidad facilitados por el Ministerio del Interior, los delitos contra la libertad sexual en Alcalá de Henares han crecido un 58,6 % en el primer semestre del año, pasando de 29 a 46 en comparación con el mismo periodo de 2024. En concreto, las agresiones sexuales con penetración descendieron un 33 %, de nueve a seis, pero el resto de delitos sexuales se duplicó, pasando de 20 a 40 casos.
En cuanto a la criminalidad general, los datos reflejan una ligera bajada del 1,1 % en la ciudad, aunque con un preocupante aumento del 50 % en los delitos graves y menos graves de lesiones y riñas tumultuarias.
Reacciones institucionales y políticas
La concejala de Seguridad, Orlena de Miguel, condenó los hechos con contundencia: “Exigimos la máxima firmeza contra el agresor. Desde alcaldía hemos puesto a disposición de la víctima todos los recursos municipales y regionales previstos para estos casos”. La edil subrayó la rápida coordinación entre Policía Local y Policía Nacional, cuya intervención permitió la detención inmediata del sospechoso.
El Ayuntamiento reiteró su compromiso con la protección de las víctimas y la lucha contra la violencia sexual, recordando la existencia de servicios municipales de atención psicológica, social y jurídica.
Por su parte, el portavoz de VOX en el Ayuntamiento, Víctor Acosta, vinculó el caso con la gestión migratoria: “Las mujeres pagan el precio de la inmigración descontrolada. La seguridad de nuestras mujeres, jóvenes y familias está por encima de la corrección política”. Acosta exigió medidas inmediatas como la expulsión de extranjeros que cometan delitos graves y el cierre de centros de acogida, insistiendo en que “la prioridad son los españoles y la seguridad de nuestras calles”.
















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