- Remitida por la Federación Comarcal de Asociaciones Vecinales de la Comarca
Decenas de entidades y personas voluntarias de nuestra ciudad están involucradas en este colectivo, poniendo por encima de todo a las personas y sus historias, que al fin y al cabo solo vienen a buscar un mejor futuro y una mejor vida para ellos y para sus familias. Ayudándoles a adaptarse a este nuevo entorno, enseñándoles el idioma, formándoles de cara a futuros trabajos, y ayudándoles en los papeles de residencia.
Queremos alejarnos de informaciones de marcado carácter racista y xenófobo que de cuando en cuando saltan a la opinión pública y a las redes, muchas veces fomentadas por quienes deberían poner todo el esfuerzo y compromiso para dar viabilidad a los proyectos de vida de estas personas.
Al fin y al cabo, son trabajadoras y trabajadores que vienen buscando una mejora en su calidad de vida y que están en disposición de aportar a esta sociedad todos los beneficios de un trabajo justo y con derechos.
Vemos en nuestras casas, calles y puestos de trabajo cientos de casos similares, en el mundo de los cuidados, en la construcción, en la industria o en cualquier lugar donde se les permite trabajar, vivir y aportar.
Desde esta Federación Comarcal y sus asociaciones vecinales nos ponemos al servicio de la causa de “ALCALA ACOGE”
…y algunos hasta sin darse cuenta. ¡Qué ataques de generosidad y solidaridad nos entran para proteger a los inmigrantes ilegales que han sobrevivido al océano y a otras grandes dificultades! (a los “primos africanos de Zumosol”)
Ya lo dice el artículo: “Vemos en nuestras casas, calles y puestos de trabajo cientos de casos similares, en el mundo de los cuidados, en la construcción, en la industria o en cualquier lugar donde se les permite trabajar, vivir y aportar.”
¿Tienen en cuenta también a los que es ahogan por venir de esta maldita manera, a los discapacitados y/o débiles que no pueden ni emprender este viaje, a los que no tienen dinero para pagar al mafioso que les pone la patera, etc.?
Como diría un castizo: “nosá jodío”. Así cualquiera, sobre todo si se tiene una empresa o un familiar que cuidar.
Otros pensamos que sería más ético admitir sólo la emigración legal para poder, así, aplicar la generosidad y solidaridad también a los aspirantes ancianos, discapacitados, débiles, etc., aunque no sirvan para recoger la fresa en las condiciones que todos conocemos.
Pero claro, ésta (la legal) ya no sería un chollo. La legal “no nos aportaría” lo mismo que la ilegal. ¡Pero qué malos que somos!
Y algunos, como las ONG, seguro que lo hacen con altruismo y la mejor intención.
Pienso que los gobernantes sí se dan cuenta y, quizá por eso, miran para otro lado por más que estas llegadas sean ilegales y tan abundantes.
El océano les hace el trabajo más sucio. Y las mafias seleccionando a los que pueden pagar el viaje.
Que se los lleven a sus casas tan buenis que son…madre mía gente que cinismo tenemos ¡¡¡¡