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Todo ello quedó intervenido y fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil de Meco para su limpieza y pesaje y ser remitido a su análisis.
La Policía Local de Camarma, en colaboración con la Guardia Civil de Meco, han detenido a tres miembros de una familia de Getafe, una madre de 49 años, y sus dos hijos mayores de edad, uno de 23 años y otra de 18 años, por tener un cultivo de marihuana en una nave situada en el número 31 de la calle Travesía Tajo, en el polígono industrial La Raya de Camarma de Esteruelas. Los agentes calculan que cada trimestre obtenían unos beneficios de 72.000 euros aproximadamente con este negocio contra la salud pública.
Agentes del turno de tarde continuaron con la investigación, volviendo a la zona donde se había localizado el coche, prestando especial atención a esa misma calle y las aledañas como la calle Guadiana y Travesía Miño. Sobre las 19,30 horas aproximadamente percibieron un intenso olor a marihuana según se acercaban a la nave situada en el número 31 de la Travesía de Tajo, pues tenía la puerta abierta y fuera había otro coche aparcado.
Al pasar dentro escucharon música en el interior y llegaron a una segunda puerta que sí estaba cerrada. Al llamar, les abrieron cuatro personas, la madre, sus dos hijos mayores y otro menor de 13 años. En ese momento se acentuó el olor a marihuana. Además, los agentes se percataron de que en el interior se veían unos tubos de extracción de aire de gran dimensión y lo que parecía ser un habitáculo construido para el cultivo de marihuana.
La Policía Local informó a la Guardia Civil de los hechos, y de forma conjunta los agentes de ambos cuerpos hicieron una inspección a fondo descubriendo una plantación de marihuana perfectamente acondicionada, con 1.203 plantas, ventiladores, aires acondicionados humificadores, filtros de carbono para evitar el olor, transformadores, bombillas de elevada potencia, líquidos para floración y crecimiento y demás utensilios necesarios para llevar a cabo el cultivo interior. Durante el registro se intervinieron también cartuchos de arma de fuego corta y un chaleco antibala.
Los agentes detuvieron a los tres adultos, la madre y los dos hijos mayores de edad, por un presunto delito contra la salud pública hasta esclarecer quien robó el coche. El menor de 13 años ha sido entregado a la persona destinada por su madre para que se haga cargo de su custodia. No obstante, la investigación sigue en curso y no se descartan más detenciones.