- Cuando los Prunus de la calle Libreros empiezan a florecer, Alcalá de Henares se transforma de verdad.
- Crónica gráfica de Ricardo Espinosa Ibeas para ALCALÁ HOY
La historia de los prunos de la calle Libreros se remonta a finales del año 2002. Por aquel entonces, el ilustrado alcalde de Alcalá de Henares, Manuel Peinado, quiso embellecer las calles de la ciudad con una hilera de árboles en flor. Eligió los Prunus por sus flores vibrantes y coloridas, y porque serían un espectáculo inolvidable cuando florecieran. Su visión se hizo realidad, y hoy en día, 20 años después, los prunus siguen bordeando la ya peatonalizada calle de Libreros, proporcionando sombra y color.
El género Prunus se refiere a un gran grupo de árboles que incluye cerezas, ciruelas, almendras y albaricoques. Algunos de los Prunus más comunes en Alcalá de Henares son el Prunus cerasifera, el Prunus avium y el Prunus domestica. Los Prunus de la calle Libreros son especialmente llamativos cuando florecen, cubriendo la calle de un mar de flores rosas y blancas.
Estos árboles son especialmente populares en calles y parques por su resistencia y valor ornamental. Las flores de los Prunus sólo duran un breve periodo en primavera, pero durante ese tiempo son un espectáculo para la vista. Los árboles también producen cerezas y ciruelas, que los lugareños pueden recolectar y disfrutar.
Primavera en Alcalá de Henares
Cuando los Prunus de la calle Libreros empiezan a florecer, Alcalá de Henares se transforma de verdad. La ciudad se convierte en un derroche de color, y el embriagador aroma de las flores flota en el aire. Esta época del año es también una de las más festivas de la ciudad, con numerosos actos y actividades entre ellos la Semana Santa que se acaba de presentar.
Resulta particularmente atractiva de visión de los prunus surcados por el sobrevuelo de las cigüeñas que los sobrevuelan descendiendo desde los nidos de las espadañas y oquedades de la histórica Iglesia de Santa María que se erige desde hace siglos en esta principal calle de la ciudad complutense, recuperada para los peatones hace pocos años.
Como los Prunus no sólo son visualmente impresionantes, sino también prácticos y beneficiosos, su presencia es de gran importancia. La sombra que proporcionan a lo largo de las calles ayuda a mantener la ciudad más fresca durante los calurosos meses de primavera y verano. Además, su floración anual atrae a turistas y aficionados a la botánica de toda España.
Los Prunus de la calle Libreros de Alcalá de Henares son un verdadero espectáculo para la vista. Su vibrante y fragante floración señala la llegada de la primavera y convierte la ciudad en un lugar mágico. Con un poco de planificación y mantenimiento cuidadosos, los Prunus de la calle han permanecido como un elemento ornamental desde hace al menos 20 años.
Los residentes locales y los visitantes esperan ver florecer estos magníficos árboles cada año, y los Prunus se han convertido en parte integrante de la identidad de la ciudad. La belleza clásica de los prunus en flor es algo que los habitantes de Alcalá de Henares aprecian y probablemente seguirán haciéndolo durante generaciones.