- Sobresalto entre el vecindario y transeúntes que a esa hora realizaba sus compras en la céntrica y popular calle Mayor.
- Crónica gráfica de Pedro Enrique Andarelli para ALCALÁ HOY
El desprendimiento de unos cascotes a la altura del número 101, el edificio más cercano al bar ‘La Panadería’, que caían al pie de las columnas situadas en la acera frente al mural de Cisneros, alarmaron al vecindario.
A los pocos minutos se personó la Policía Local que procedió a acordonar la zona hasta la Casa Tapón cerrado el paso a viandante y transeúntes en ese tramo de la calle en el que rápidamente se situaron los Bomberos del parque de Alcalá de Henares, así como los agentes motorizaros de apoyo de la Policía Local. Dentro del perímetro, pero a una prudente distancia de seguridad, técnicos municipales observaban las actuaciones.
Tras los cordones de seguridad bajo los soportales, centenares de curiosos observaban la escena y tomaban imágenes con sus móviles, mientras comentaban la incidencia. Por nuestra parte, testigos circunstanciales del suceso, dejábamos constancia gráfica del mismo.
Los bomberos desplegando las escalas y accediendo hasta la cornisa y saneando la zona, mientras la Policía Local aseguraba el perímetro para evitar cualquier percance. Ciertamente unas insólitas imágenes, que dieron mucho que hablar en esa templada mañana del viernes.
Afortunadamente todo se quedó en un susto sin consecuencias. Media hora después, la gente pudo seguir disfrutando de sus compras, o de las terrazas de los bares de la zona, eso sí, con un sobrevenido tema de conversación.