- Comunicado de la Plataforma de Familiares y Trabajadores de la Residencia Francisco de Vitoria.
Desde el verano, la situación de los trabajadores ha sido muy dura ya que no se cubrieron las vacaciones y por desgracia, compañeros se fueron a otros trabajos con mejores condiciones. Pasaron los meses y seguíamos igual…dando lo mejor de nosotros, corriendo para poder sacar el doble de trabajo y al final, muchos de nosotros estuvimos y siguen estando de baja tanto física como psicológica.
Hemos soportado a nuestras espaldas que nos quitaran días de descanso, explicaciones sin sentido de los responsables y una falta de coordinación tan grande que nos hace sentirnos impotentes a la hora de realizar nuestro trabajo como se merecen los residentes.
Hemos vivido un COVID, un Omicrom, un brote de gastroenteritis y sin protocolos de actuación concretos hacemos lo que está en nuestras manos.
La razón de nuestra denuncia no es otra que el no querer ser cómplices de una mala praxis. No somos mercenarios, somos profesionales.
No hay nada mas frustrante que tener voluntad para mejorar las cosas y que no haya nadie dispuesto a escuchar, ayudar y solucionar y por ello, denunciamos públicamente las deficiencias del centro porque internamente, por desgracia, no hay voluntad de revertir la situación.
Como profesionales queremos que se nos deje hacer bien nuestro cometido pero para ello necesitamos medios humanos y materiales. Tenemos a nuestro cargo a personas vulnerables que nos necesitan y se merecen el mejor trato posible.
No demos la espalda a toda una generación que nos enseño a ser buenas personas y que puso a nuestro alcance las herramientas para construir un mundo mejor.
Quiero dar las gracias a nuestros compañeros de atención directa como indirecta: DUES, TCAES, personal de Servicios Generales, de auxiliar de servicios, de mantenimiento y de cocina por el trabajo que hacen como pueden en este tiempo tan difícil.
Tenemos vocación y eso hace que para nosotros no sean muebles son personas…son nuestros residentes y merecen una comida digna y con valor nutricional, un agua potable y sin altos niveles de legionella, unas toallas que no estén rotas, unos empapadores que ayuden en su descanso, una medicación adecuada a sus enfermedades, unos paseos por los jardines y sobre todo, que los trabajadores que mas tiempo pasamos con ellos podamos escucharles cuando nos necesitan.
Esto no se trata de política, ni de rojos o azules…se trata de que el tiempo que tengan que estar aquí sea lo mas digno posible, de que realmente se sientan bien y no abandonados por unas instituciones que miran para otro lado cuando se exponen tantos problemas que necesitan solución de carácter urgente. A nadie le gustaría vivir años de vida así…Nuestros mayores han luchado mucho y ahora nos toca a nosotros dar voz y pelear por lo que se merecen…POR UNA VIDA DIGNA
Agradecer a todas las asociaciones, colectivos y personas que quieren apoyar esta lucha y que solo así, juntos y unidos, conseguiremos un mundo mejor.