- El letrado Juan Manuel Medina, que representa a cuatro de las familias denunciantes, ha confiado, en declaraciones a Efe, en que se demostrará la culpabilidad del investigado.
- Crónica gráfica de Ricardo Espinosa Ibeas para ALCALÁ HOY
El presunto pederasta del municipio madrileño de Valdeavero, acusado de más de una decena de abusos sexuales a menores, ha negado la mayor durante su declaración ante el juez de Alcalá de Henares que instruye una de las causas penales, atribuyendo las acusaciones a “desavenencias” con los padres, han informado fuentes jurídicas.
Cristóbal L.C., alias ‘El Toba’ y frutero de esta localidad madrileña, se le investiga por presuntos abusos sexuales a un total de dieciséis menores, cuyas denuncias están repartidas en diferentes juzgados de Alcalá de Henares.
El abogado de cuatro de las niñas, el letrado Juan Manuel Medina, ha señalado que el relato del investigado no se sustenta frente al testimonio “lineal” y “persistente” de los menores
Lorena la madre de una de las victimas dice a Buenos Días Madrid que su hijo está en tratamiento psicológico y con pastillas: “el niño está fatal, está en tratamiento psicológico, psiquiátrico, y nosotros estamos destrozados yo he tenido valentía de mostrarme más que nada para que salgan más niños que les ha pasado lo mismo que al mío y para que no haya miedo de salir a contarlo, de decir lo que ha hecho con todos estos niños”.
La Guardia Civil arrestó al supuesto pederasta el 16 de diciembre. La investigación comenzó en verano tras una denuncia presentada por la madre de una víctima, que confesó los abusos pese a que el hombre amenazaba a los niños afectados. A raíz de esta denuncia han ido apareciendo nuevos casos, todos niños varones de entre 3 y 13 años.
El frutero, que no tenía compinches, lleva ingresado desde entonces en prisión provisional en la cárcel de Alcalá de Henares. Cristóbal L. C., muy conocido en el municipio, donde se había ganado la confianza de los padres, aprovechaba que los menores entraban a la tienda para ofrecerles golosinas, refrescos y bolsas de frutos secos gratis con la intención de tocarles sus zonas íntimas metiéndole la mano dentro del pantalón.