- Remitida por Agustin Mata
Dentro de poco se cumplirán 83 años del asesinato de mi abuelo, concretamente un 28 de Noviembre, mi abuelo deber estar en una de estas cunetas, “Creemos que en una fosa común en Paracuellos”
Mi abuelo vivía en el Nº 5 de la C/ Ferraz (Alcalá de Henares) padre de 5 hijos y un día fueron a buscarle (mi padre tenía un año). Aparecieron unos milicianos que imagino, amablemente le invitaron a acompañarles. Así reza en el Archivo Histórico Nacional, ingresó en el penal de San Antón el día 18 de octubre “según contaba mi abuela no volvería a verle más”.
En dicho penal los estupendos milicianos 30 o 40 (gente normal y corriente, gente de la calle) se hicieron cargo de la prisión siguiendo las órdenes de la consejería de orden público a cargo de un tal Santiago Carrillo.
En dicho penal y tal y como figura en la causa disponible para cualquier persona que quiera consultarla a través de internet.
(ARCHIVO HISTORICO NACIONAL FC-CAUSA_GENERAL,1526,Exp.3) El trato a los presos fue bestial, se cometieron todo tipo de vejaciones y malos tratos despertándoles a culatazos o poniéndoles una pistola en el pecho y todo para terminar montándoles en camiones y siendo fusilados en alguna de esas cunetas.
- Jacinto Ramos Herrera (Director)
- Agapito Saiz de Diego (Responsable) “a la vuelta de las expediciones decía que los ametrallaba como conejos, arrojándoles a las zanjas habiendo matado a más de 300”
- Victoriano de la Paz (Sargento)”Decía que había que despertarles a bombazos”
- Gonzalo García Beltran“el Tartaja”(Sargento)
- Santiago del Amo “Petrof” el bigotes (Llevaba un tatuaje que ponía “Fusilador”)
- Gonzalo Montes Sierra “El Dinamita”(Se emborrachaba frecuentemente y vejaba a los presos).
- El traganiños (El limpia botas de la estación del norte)”Destrozo todos los cuadros del convento de los Agustinos”.
Estos eran algunos de los más activos en cuanto a dichas vejaciones y todo ello al amparo de la Consejería de orden público (Santiago Carrillo) y con la firma del delegado Segundo Serrano Poncela, que fue quien firmo las órdenes de salida como si fueran a ser liberados para luego fusilarlos.
Por muchas placas que se retiren, la historia está escrita y no podrán bórrarla.
A la memoria de mi abuelo Julio Mata Martín y a todas las personas que murieron en una guerra entre amigos, familiares y gentes de bien. “Aquel que no conoce su historia está condenada a repetirla”.