- Seguramente hubo alguien que ayer se sonrió al terminar de leer el artículo cuando yo decía eso de «bueno como entramos en Semana Santa y se trabaja menos el Ayuntamiento talara menos árboles en Alcalá…Pero ya,ya…
- Crónica gráfica de Pedro Enrique Andarelli
Cuando aún resuenan los ecos de la tremenda tala del vivero de Reyes Católicos, una arboleda entera, el equipo que dirige el concejal Alberto Egido, se dispone iniciar su particular Semana de Pasión, subiendo a la colina del Campo del Ángel, y talando este lunes día 15, dos de los tres últimos pinos centenarios que quedan del antiguo aeródromo de 1913. Sin Inventario de Arbolado que diga la situación de cada árbol, como marca la Ley, sin Plan de Gestión del Arbolado, como marca la Ley, y sin el no obligatorio, pero importante, Catálogo de Árboles Singulares, él continua en su particular “cruzada” tala que te tala de los escasos árboles centenarios que nos quedan, y de los que no lo son.
Mientras tanto el Alcalde Javier Rodríguez Palacios, de quien en último extremo dependen todas las concejalías, pues son delegaciones y puede destituir a cualquier concejal en cualquier momento, o al menos paralizar todas las talas en tanto se elaboran los documentos legales, da la callada por respuesta, quizá esperando que el tema suba de tono y alcance aún mayores proporciones de escándalo público, él vera.
¿Y la oposición, Miguel Ángel Lezcano, líder de Ciudadanos, y Judith Piquet, cabeza de lista del Partido Popular, tampoco van a decir nada? ¿Quizá esperando que la denuncia ciudadana desgaste a los componentes del Equipo de Gobierno ahora que estamos en periodo electoral?, el tema es de Ciudad; hasta ahora tan solo se ha pronunciado Unidad Podemos Izquierda Unida, con un protesta formal y una denuncia ante el Seprona, es importante que los demás también se pronuncien.
Y el lector puede que se haga la pregunta: ¿Y cómo se ha llegado a esta situación?
Pues como casi siempre por un cúmulo de circunstancias.
La primera es la presencia de dos funcionarios en el Departamento de Medio Ambiente, si, dos, ella y él, que nunca se da un criterio general, cuyo planteamiento es que algo así como: ”que los árboles deben de estar en los parques y jardines que en las calles dan muchos problemas de todo tipo.”
De hecho esta situación y problemática viene ya del mandato anterior con un Equipo Municipal de Gobierno de signo político completamente opuesto al actual.
La llegada hace cuatro años a la concejalía de Medio Ambiente de un ecologista, esto puede parecer sorprendente pero como se va a poder comprobar no lo es. A Alberto Egido lo que le gusta es el Medio Ambiente en general: Plantaciones amplias, huertos urbanos, semanas de biodiversidad, etc. El tema del Arbolado Urbano, ni le interesa especialmente, ni le llama la atención, tan solo entra en el lote y no hay más remedio que gestionarlo, pero le viene grande, y además le plantea un hándicap: es lo que más se ve de la gestión.
Pero además como su interés es medioambientalista, de los árboles le interesa su aportación de oxígeno y su captación de anhídrido carbónico, y cuando se le plantea la situación de que el coste debido al riego de la plantación de un árbol urbano es diez veces superior a la plantación de un árbol periurbano, naturalmente opta por la primera pues no tiene en cuenta otros factores que aportan los árboles como la humedad, el frescor y la sombra tan necesarios en un territorio como el nuestro, y así hace suyo el planteamiento de los dos técnicos, porque coincide en este aspecto con el suyo y ese es el resultado de la política de Arbolado Urbano que se viene realizando durante estos cuatro años.
Así el propio Ayuntamiento reconoce en sus páginas de Internet que hasta el año 2017 había en la ciudad 1.316 alcorques vacíos, y hace unos meses el concejal reconocía que aún había 1.165, poco les ha cundido, y si hablamos de los cientos, quizá también más de 1.000 alcorques que han podido ser amortizados, o sea, tapados, el tema es escandaloso.
Y lo es, porque aparte de las consideraciones del concejal y de sus técnicos de cabecera, eso ni es razonable, ni es lo que marca la Ley 8/2005 de Protección y Fomento del Arbolado de la Comunidad Autónoma de Madrid, promulgada el 31 de diciembre de 2005, en cuyo Preámbulo dice: “La riqueza y variedad medioambiental de nuestros pueblos y ciudades vienen integrándose, desde hace siglos, en la fisonomía de los municipios a través de parques y jardines ya sean públicos o privados, paseos, alamedas, bulevares o simplemente aceras arboladas.
La ciudad aparece fuertemente marcada por su arbolado. El árbol forma parte del patrimonio histórico-artístico de la ciudad y es un ingrediente inseparable de su actual puesta en valor y comprensión, configurando el derecho social al paisaje.
Se ha tenido un extraordinario cuidado en regular un sistema de autorizaciones que, ante las cada vez más agresivas circunstancias y actuaciones que se plantean en la ciudad, garantice las precauciones suficientes y necesarias para evitar, de manera especial, las talas o apeos de arbolado, así como las podas drásticas e indiscriminadas que, en todo caso, se han de rodear siempre de toda cautela a fin de asegurar su carácter de último recurso y no como un procedimiento al servicio de urgencias o actuaciones coyunturales.”
Leyendo este texto con atención queda claro el porqué de la ley, a que afecta, y los peligros a los que se somete el arbolado urbano, el legislador sabía muy bien lo que estaba haciendo, pero como lo sabía muy bien añade estos cuatro artículos fundamentales que aún el Ayuntamiento de Alcalá no ha cumplido:
“Artículo 1. Objeto y ámbito de aplicación
Las medidas protectoras que establece esta Ley se aplicarán a todos los ejemplares de cualquier especie arbórea con más de diez años de antigüedad o veinte centímetros de diámetro de tronco al nivel del suelo que se ubiquen en suelo urbano.
Protección
Artículo 2. Prohibición de tala
- Queda prohibida la tala de todos los árboles protegidos por esta Ley.
- Cuando este arbolado se vea necesariamente afectado por obras de reparación o reforma de cualquier clase, o por la construcción de infraestructuras o por su presencia en el interfaz urbano forestal, se procederá a su trasplante.
- En aquellos casos en los que la tala sea la única alternativa viable se exigirá, en la forma en que se establezca, la plantación de un ejemplar adulto de la misma especie por cada año de edad del árbol eliminado.
- El autor de la tala deberá acreditar ante el órgano competente, por cualquiera de los medios aceptados en derecho: El número, la especie, la fecha y el lugar en que se haya llevado a cabo la plantación de conformidad con la autorización de la tala, informando, durante el año siguiente a la plantación del nuevo árbol, sobre su estado y evolución.
- A los efectos de la presente Ley tendrán la consideración de tala el arranque o abatimiento de árboles.
Artículo 5. Inventario municipal del arbolado urbano
- Las entidades locales que no cuenten con un inventario completo del arbolado urbano
existente en su territorio municipal deberán proceder a su elaboración en el plazo máximo de un año, desde la entrada en vigor de esta Ley. Dichos inventarios se actualizarán periódicamente. - Cada inventario municipal del arbolado urbano deberá incluir información referente al número de pies, especies o variedades, dimensiones, edad aproximada, estado sanitario y localización del arbolado con referencia a elementos concretos del viario urbano o a
agrupaciones singulares de árboles.
Artículo 6. Plan de Conservación
- En el plazo máximo de dos años, computado desde el momento de la entrada en vigor de la presente Ley, los órganos de gobierno de las entidades locales aprobarán Planes de Conservación para el arbolado urbano existente en cada municipio, que deberán ser revisados con una periodicidad no superior a cinco años.
- Las determinaciones de los Planes de Conservación afectarán tanto al arbolado urbano público como al privado y, una vez aprobados, serán de obligado cumplimiento.
- Dichos planes pondrán de relieve los principales problemas sanitarios y de conservación del arbolado, planteando las iniciativas y actividades que parezcan más oportunas adecuadamente localizadas, descritas, evaluadas y programadas en el tiempo.”
Naturalmente, con los planteamientos de la Concejalía y sin elaborar estos dos apartados legales la situación de nuestro Arbolado Urbano está sujeta a la discrecionalidad de los técnicos y del concejal cuando no a la arbitrariedad, es como si en Urbanismo no existiese ni el Plan General de Ordenación Urbana y el Plan General de Urbanismo, y eso es lo que nos sucedió en otro tiempo en dicho apartado, que un día se tiraba una casa, otro se hacía una barbaridad en un edificio, y otro en cualquier lugar de la ciudad.
Pero ahora la normativa está clara, es pública y todo el mundo, concejalía incluida, sabe a que atenerse y con que normativa tiene que conducirse, en Arbolado Urbano no, estamos como al nivel del Urbanismo a finales de los años 70 y principios de los 80, así un día se tala un árbol aquí, otro allí, o de pronto hay una tala monumental, y eso sí, siempre los árboles “están enfermos”, debemos de ser la ciudad con más árboles enfermos por hectárea de España, pero nadie dice de que enfermedad, o “tienen peligrosidad”, pero tampoco nos dicen en general cuál es esta, o se estudia que forma hay de salvar árboles venerables con casi un siglo de antigüedad, tan solo se les tala, sin buscar soluciones, algunas tan sencillas como las utilizadas ahí al lado, en el Jardín Botánico de Madrid, en Atocha, pero como no está hecho el Inventario donde hay que señalar la situación de cada árbol, ni el Plan de Gestión, pues ya sabemos quién dice, o no dice lo que tiene el árbol y que se hace con él.
Pero es que además hay algo más grave que también es preocupante, y es que se puede haber estado vulnerando la Ley durante estos cuatro años, y sería necesaria una investigación que lo determine: En la nota de prensa del Ayuntamiento habla de la obligación de reponer los 30 árboles talados en el Vivero, ¿Qué dicen?, como se puede ver en el Artículo 2, apartado 3, son: un árbol adulto por cada año de edad del árbol abatido, o sea en este caso más de 1.500 años /árbol.
Pero claro es que el propio Ayuntamiento se salta la ley “autoexime” de cumplirla, este es el texto del decreto por el que hace dos semanas se taló un pino centenario en el Parque O´Donnell, del que por cierto, por increíble que parezca, pueden verlo en la web municipal ¡¡No está hecho ni siquiera un simple inventario de arbolado!!, esto es lo que dice el texto: “ 4…..Se entiende que por el carácter de árbol peligroso, no son de aplicación las medidas compensatorias de la Ley 8/2005 de Protección y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad Autónoma de Madrid.”
¿Cómo?, ¿Dónde dice eso la Ley?, obviamente en ningún sitio, por eso no cita el artículo de referencia, porque el legislador no dejo ese “escape”, lo dice claramente, y ahora uno puede preguntarse: ¿han avalado este decreto los Servicios Jurídicos Municipales? ¿Cómo puede avalar el Concejal este informe?¿Ha sido esto firmado y promulgado por Alcaldía?
Y por último:
¿Cuántos casos similares se pueden haber dado en estos años?
Y en esta situación ¿nadie va a hacer nada?, ni el Alcalde, ni la oposición, ¿tendremos que ser los ciudadanos de a pie los que plantemos cara una vez más? El tema no es menor, es muy importante, hay indicios de ilegalidad, hay carencia legal de obligado cumplimiento que aún no se ha elaborado ni aprobado, y mientras tanto nuestra ciudad sigue perdiendo árboles.
Por desgracia son ecologistas de boquilla.
Ecologistas que viven de subvenciones para captar fondos y crear fundaciones pro arbol; semana del arbol; semana de biodiversidad,;semana del huerto urbano; semana de la semilla; semana de la abeja; semana de los claveles de la señora pepi del tercero, y así un largo etc.
Subvenciones una tras otra para costear sus salidas de domingo al monte; semanas ecológicas o huertos urbanos que casualmente acaban en manos de amigos afines.
Luego les preguntas por la tala o podado erroneo y te contestan con un escueto “era necesario por seguridad” Ya está, solo una frase. Eso sí… cuando llega la hora de pedir subvenciones al ayuntamiento, Comunidad, España o Europa…. rapido levantan sus posaderas del sillón y te escriben un informe de 1.000 páginas sobre como aplicarán en nuestra ciudad un ecologismo ético multicultural y feminista.
Delante de mi ventana han dejado de un arbol solo el tronco, arrancando todas las ramas sin dejar una sola. No he dado aviso al ayuntamiento diciendo que aquellas ramas molestan y había que podar. Digo esto porque cuando preguntabas por estas podas, te contestaban siempre lo mismo ” Es que un vecino del portal se ha quejado” Pues en este caso me ha tocado a mi.
Mentiras una tras otra.