Esta publicidad institucional “Alcalá: una experiencia única“, fue instalada por el anterior equipo de Gobierno del Partido Popular sin el pertinente permiso de la Demarcación de Carreteras del Estado en Madrid.
Poco después, el Ministerio de Fomento exigió al Ayuntamiento su retirada al detectar una “infracción por instalación publicitaria fuera del tramo urbano”, advirtiendo de posibles sanciones.
La operación consiste en la retirada de los paneles existentes, que serán sustituidos por una malla electrosoldada y galvanizada, que impida la caída de cualquier elemento hacia la autovía. Al mismo tiempo, se trata de un material permeable al viento y que no sufre deformaciones por efecto de este.