- Según las fotografías que ha realizado en la ‘zona cero’ del fuego, en la plataforma donde antes se ubicaba la planta de KUK Medioambiental, además de los residuos hay varios charcos de agua que los arrastran hacia el cauce del arroyo.
- El coportavoz nacional de Equo denuncia que permanecen sin limpiar varios montones de residuos que el agua arrastra hasta un afluente del río Henares
Según el digital en su edición de Castilla-La Mancha, en una información rubricada por Alicia Avilés que recoge declaraciones de López Ugalde, el “lamentable” escenario es el mismo que hace cuatro meses, cuando lo visitó por última vez, coincidiendo con el anuncio de la empresa pública TRAGSA de que dejaba las tareas de limpieza. “Así se ha quedado, no se ha terminado la limpieza, no se ha llegado hasta el final y ahora con las lluvias todos esos contaminantes están siendo arrastrados. Hemos ido al desagüe del río y huele mucho a disolvente. Se nota que siguen saliendo tóxicos”, recalca.
López de Uralde dice no comprender por qué ni la Junta de Castilla-La Mancha ni el Ministerio de Medio Ambiente han terminado la limpieza. Afirma que aunque, según la ley, la responsabilidad es del propietario de la empresa, la limpieza debiera haberse llevado a cabo hasta el final y “luego dilucidar judicialmente quién se hacía cargo de los costes”, que sería imputable a los empresarios. “Lo que no es comprensible es que lo hayan dejado abandonado al 80% del trabajo hecho”. Además, la zona no está acordonada ni vigilada: “no hay nadie trabajando ahí, se puede llegar hasta donde están los residuos. No se ha hecho nada en meses”.
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